Preciosa masía de finales del siglo XIII (1792), situada en Montemar, de unos 546 m2 construidos en gran parcela de 3268 m2, la cual está incluida en el inventario del Patrimonio Arquitectónico de Cataluña. Se trata de una masía de planta basilical con planta baja, piso y desván. La fachada, que está decorada con esgrafiados de dibujo lineal azufre y un fondo de color salmón y blanco, cuenta con un reloj de sol que se repite en la fachada lateral y un medallón con la fecha de construcción, 1792. La puerta principal forma un arco rebajado de piedra roja de marés con estucado en la parte superior, y está coronada por un balcón con barandillas de hierro forjado y aplicado de cerámica verde y blanca en forma de cartabón por debajo. El vestíbulo y las estancias de la planta baja están cubiertas por bóvedas y los pisos superiores tienen envigado de madera. En el desván, la cubierta (que es a dos aguas) fue restaurada por completo aproximadamente en 2006. Un magnífico jardín, que cuenta con antiguo pozo, huerto y árboles frutales rodea esta propiedad de ensueño.